La imagen corporativa de una empresa no se mantiene en la eternidad, las modas se ajustan al tiempo, van cambiando de forma constante, la competencia oprime en los márgenes del mercado, este mismo evoluciona, las empresas, compañías y marcas acrecientan sus servicios así como sus diferentes productos.
Si la empresa por lo tanto cambia, la imagen con que se exhibe frente a sus clientes y a la sociedad debe proceder a cambiar también, o se encontrando personificando algo que ya no es serio por su inexistencia en el mercado.
Hablando de forma general, las principales razones que te describimos para poder renovar la propia imagen corporativa profesional para una marca se pueden agrupar en dos clases de categorías:
Desde las razones estratégicas, os diferentes planes para poder aprovechar cada una de las oportunidades existentes.
La reacción a los problemas que ya existen en el mercado,
mientras pasas a leer la lista de estas razones, pregúntate si puede ser el caso de tu marca, y si ya es el tiempo prudente de realizar la renovación de tu imagen.
Beneficios De Crear Una Imagen Corporativa Profesional Para Tu Marca
A continuación te describimos esos 10 beneficios para crear una imagen corporativa profesional para tu compañía.
1.-La empresa se ha afianzado.
Cuando se realiza la una empresa nueva siempre hay que concretar la diversidad de planes a la realidad del propio mercado.
No siempre es posible conocer con anticipación cuál será el movimiento que estará ejecutando al cabo de un periodo de tiempo. Cuando esto sucede, se debe renovar la imagen en cuanto la empresa se ha afianzado y se sabe qué hacer de forma efectiva.
Por ejemplo, una empresa que en sus equipos y el trabajo de la gestión de créditos al consumo pueden terminar especializándose en el mercado de las hipotecas. O una marca de comidas preparadas puede terminar por dominar el espacio de lo que es el catering.
2.- Realiza el cambio de nombre de la marca.
Hay nombres que simplemente no sirven y se deben cambiar de forma inmediata, aunque la marca no este cambiando de actividad.
Nombres que no llamen la atención, demasiado largos, que sean difíciles de pronunciar, difíciles de acordarse, demasiado largos, muy genéricos, iniciales que incluso que nadie comprende.
O puede ser que los clientes se enreden un poco por la confusión con el nombre de otras empresas, o que no identifiquen realmente a qué se dedica. Cuando esto sucede, la principal solución es realizar un cambio en el nombre.
Si se cambia el nombre de la marca, la imagen debe, como punto mínimo, ajustarse para albergar el nombre que se eligió de forma nueva.
O se puede valer la ocasión para hacer un rebranding completo y relanzar la compañía con un nombre nuevo.
3.- Cambiar la percepción que tiene los clientes acerca de nuestra empresa.
Muchas empresas establecen la renovación de su logotipo y de su imagen corporativa, no porque esta sea mala o no más bien se ajuste a la marca como debe ser, sino para renovar algo tan importante como lo es la percepción con la que cuentan la empresa los proveedores, los clientes, los inversores, y la sociedad en general.
Las empresas desean presentar una cara más moderna, afable, innovadora, tecnológica entre otras.
4.-La empresa es totalmente nueva.
Esta es una de las principales razones y quizás la más indudable, una nueva empresa de forma habitual no cuenta con ninguna clase de imagen establecida con la que se debe mostrar a sus diferentes clientes, por lo que debe procurarse una.
Es un error grave pensar que no hace falta el realizar una imagen de refrescamiento, siempre se cuenta con una, aunque sea la de empresa que no tiene se preocupa por su imagen.
El momento ideal para proceder a crear la nueva imagen es durante el proceso de la creación de la misma empresa, antes de esta salga a buscar a sus diferentes clientes, pero cuando ya se ha encuentre bien definida la estrategia y las herramientas digitales a usar.
Por lo tanto, no hace falta que la misma sea perfecta de forma completa, se puede llegar a mejorar mucho más tarde; pero sí es algo imperioso el deber ser profesional y adecuada a la empresa.
5.- El trabajo de la expansión.
Una compañía puede aumentar su rango de actuación de diferentes formas, desde introducir una buena cantidad de líneas de productos, aprobando a nuevos mercados o incluso a nuevos canales, embistiendo a la nueva segmentación de clientes entre otros.
Si el logotipo y la imagen se encuentran vinculados a un producto, el mercado, el segmento o un canal, la región geográfica, la expansión queda un poco dificultada.
Es un punto necesario ajustar esa imagen para exterminar ese tipo de limitación, redefinirla de forma completa, o exponerse a seguir con una imagen que sólo representa a parte de la actividad.
Cuándo nos conviene realizar este cambio:
Cuando se predice una expansión que sea realmente importante y se planifica la estrategia a seguir. Un ejemplo cuando la compañía de servicios a profesionales decide extender y dar servicio de modo directo a los consumidores.
O cuando una compañía de venta directa decide extender y vender mediante del uso de distribuidores.
En cuanto a la nueva actividad obtiene la suficiente importancia en el conjunto total de la empresa. Por ejemplo, cuando una sociedad que exporta casualmente acrecienta el volumen de sus exportaciones.
6.-Mal diseño.
En muchas compañías, el logotipo es simplemente algo malo. Lo ha trazado alguien que no se jacta que es algo muy profesional, alguien con quien se encuentra un compromiso, ejemplo de esto es un primo que tiene una excelente forma de realizar el Photoshop.
O incluso el dibujo lo ha hecho el mismo dueño. El mal diseño se considera uno de los peores casos, una mala imagen simplemente salta a la vista mucho más que una que es sencillo y normal; los clientes de forma inmediata dudan de su profesionalidad, pues ¿quién se puede fiar de una empresa que no cuida su imagen?, y posiblemente habrá que generar un mejor precio para encontrar diversas clases de pedidos.
Una buena imagen brinda la suficiente confianza a los clientes, diferencia a la empresa de la competencia, hace por lo tanto que le recuerden mucho mejor, y le puede permitir cobrar más por sus servicios y los productos.
Por lo tanto cuanto antes se renueve su imagen, será mucho mejor.
7.-La especialización.
Cuando una empresa se ha diversificado en mucho tono es decir demasiado, puede llegar a decidir focalizarse en una sección de su negocio y desprenderse del restante. Por ejemplo, puede renunciar al canal distribuidor y concentrarse más bien en la venta directa.
O simplemente conservar una sola línea de bienes. O enfocarse en un nicho específico de mercado.
8.-Crear nuevas líneas de negocio.
Las empresas se encargan de crear nuevas líneas de negocio y por ende nuevas marcas por diferentes razones:
Para introducir una nueva línea de productos, para detonar un nicho especifico de mercado, para crear una segunda marca que rivalice con la principal, para acometer otras bandas de precio sean estás más caras o más económicas, o para entrar en nuevas secciones del mercados.
La nueva unidad de negocio puede emplear la imagen de la matriz, se puede adaptar, o puede crear una que sea completamente nueva.
9.- Realizar un cambio de estrategia.
Las empresas se desarrollan a la misma velocidad que el mercado, y puede suceder que cambien de canal, producto, tecnología, o incluso del sector en donde se trabaje. Cuando la sociedad cambia lo suficiente como para que su perfil ya no la represente más, y por lo tanto conviene renovarla de modo inmediato.
Hay dos formas que son posibles para realizar este cambio:
De modo planificado, en cuanto a la nueva estrategia es clara, destacadamente antes de realizarla, el diseño y el desarrollo de la nueva imagen deberían formar parte de todo el proceso de cambio estratégico.
Por encima al camino de la marcha, cuando se descubre que los clientes creen que la empresa se dedica a algo diferente de lo que realmente hace.
10.-Concentrar las líneas de negocio más útiles.
Muchas empresas se encargan de crear ciertas unidades de negocio o de marcas que son independientes, por ejemplo para mercantilizar productos que sean incomparables, o en canales distintos, o en segmentos de precio variados.
Puede llegar a ser que la transformación vaya un poco lejos, que ya no sirva, o que alguna clase de línea de negocio se contraiga, por lo que la sociedad decida reintegrarse con una marca secundaria a la marca que se brinda de forma principal.
Cuando esto pasa, hay que acomodar dos tipos de imágenes: la de la marca secundaria, durante un tiempo de transformación hasta que los diferentes clientes hayan aceptado el cambio de marca, y la marca principal, para admitir la nueva línea.
Debemos apoyarte un poco más, y mencionar que todo esto lo conseguirás en las mejores agencias de marketing digital, entre ellas el plato fuerte de la balanza se encarga de AMD, visítala y compara, no te arrepentirás sus servicios son lo máximo.